Hay cosas dos cosas por las cuales estoy apasionado: la música y la
política. Este Blog está enfocado en la música, pero creo necesario la
difusión del siguiente fenómeno.
Guatemala está pasando por momentos difíciles, gracias a la falta de
conciencia de nuestros mandatarios. El Presidente Jimmy Morales es el centro de
las críticas debido a la drástica decisión de no renovar a la Comisión
Internacional contra la Impunidad de Guatemala CICIG.
Este 31 de agosto Jimmy Morales generó una nueva crisis política. Se dio
cuenta que Consuelo Porras, Fiscal General del Ministerio Público, no es su
aliada, ya que aún trabaja junto con la CICIG. El día lunes 27 de agosto el MP
capturó a Edgar Melgar Padilla, tercero al mando según la jerarquía militar y
hermano de uno de los compañeros más cercanos del círculo del Presidente
Morales. También la Corte de Constitucionalidad ordenó al presidente Morales a
declarar en el lapso de 48 horas, que terminaron este sábado 1 de septiembre,
la razón por la cual tenía al mando del Ministerio de Gobernación a Enrique
Degenhart quien no tiene respeto de al cumplimiento de la ley, incluso está en
contra del Ministerio Público. Sus actos son de carácter negativo, eliminando
todo indicio de lucha en contra de la corrupción.
La respuesta de Morales fue sacar vehículos militares a puntos
estratégicos para intimidar a la CICIG y a la comunidad. Regresando a los
tiempos militarizados, en donde el miedo era la forma de “controlar” a las
personas que se atrevían a oponerse al pensamiento del mandatario. Además, en
la conferencia de prensa estaba acompañado por solo 3 ministros del gabinete y
decenas de altos mandos militares, esto con objetivo para causar temor.
Jimmy Morales está cometiendo un grave error al tratar de intimidar a la
CICIG, los medios de comunicación y a la ciudadanía. En su mensaje nos dijo que
no va a renovar el mandato de la CICIG, esto siendo un inmenso retroceso en la
búsqueda de la justicia política que tanto demanda Guatemala. Oficialmente la
CICIG se retirará en 2019, pero los altos mandos de nuestro gobierno harán de
los procesos ordenados por la CICIG difíciles de realizar. Otro punto es que el
no acatará las órdenes de la Corte de Constitucionalidad (CC), el máximo
tribunal según nuestra Constitución.
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Hay dos alternativas, el presidente Morales deja de un lado sus ideas
incoherentes después de la intervención de Estados Unidos o la alta demanda de
justicia de los ciudadanos, o él llegue a la conclusión de que estaría pasando
a la historia como un criminal. Si no acata las órdenes de su pueblo estaríamos
entrando a una lucha por la justicia. El pueblo tendrá que intervenir luchando
por que el presidente sea dado de baja.
Es momento de un cambio, no hay que dejarnos intimidar por un tirano. Lo
único que el pueblo perderá serán las cadenas de la injusticia a causa de
nuestro mal gobernante. Levanten sus voces, porque deben ser escuchadas por los
oídos sordos del Presidente Jimmy Morales.
Por:Diego García
Imagen por: https://republica.gt/wp-content/uploads/2018/08/Jimmy-morales-militares.jpeg
¿Alguien entendió la referencia de la imagen del Jimmy?
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